Te estás transformando a tu nuevo Ser, dejando las viejas formas y los viejos contenidos, en apariencia, ya que dicha transformación se está llevando a cabo desde los niveles de comprensión a través de la conciencia. Te estás reestructurando desde los cimientos en formas no reconocidas por ti hasta el presente. Te sientes nuevo, renovado y con energías vitales diferentes...te sientes raro.
No sabes si estás o no, donde estás. La Paz está formando parte de tu cotidiano aún en medio del caos.
Sabes y no reconoces de donde proviene esa sabiduría, pero comienzan a asomar las certezas, aunque no logres comprobarlas para los demás y sólo te presentas como el ejemplo.
Todo sucede, nada sucede, dependiendo del observador y su fina captación a lo sutil.
Es placentero sin motivos visibles.
Todo está sucediendo dentro. Observas sin juicio. Ves, observas y captas la transformación cuántica dentro de la esencia misma.
Reconoces la maravilla.
Te estás uniendo a tu verdadero Ser. Él está tomando el mando y unificando a todos los cuerpos/conciencias inferiores en una misma expresión de ti mismo.
Te despojas sin saber cómo, de lo inútil, lo inservible.
Reconoces lo auténtico, lo esencial, la capacidad de transformación y te sorprendes. Te amas y aprecias el valor del momento.
Sigue así...el nuevo Ser está realizando su entrada triunfal al nuevo mundo...a la nueva conciencia...al nuevo Ser, que en breve serás tú.
Se está completando la promesa de Dios. Dale ese espacio como lo has venido haciendo y en breve verás la maravilla completa que Eres.
En Amor y Fe
Mónica Puenzo
Gracias, gracias...ahora se
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