El cambio ya está encima de ustedes. Las tranquilizadoras palabras de los eruditos no pueden hacer nada para alterar el curso del destino. Mientras los eventos mundiales rugen en desafío contra el inevitable renacimiento de la existencia planetaria, de todos modos avanza el ritmo constante del cambio sin abatirse, insondable, impertérrito de las voces temblorosas y los osados pronunciamientos de quienes se consideran sus administradores. Sí, está a punto de darse la vuelta en dirección a un abrupto cambio y una agobiante desesperación, pero la desolación, la profanación de la Tierra no está dentro del margen de la lente del destino. Sin importar la cinética del cambio, ustedes están en la senda de regreso al origen de donde provienen. Su verdad está emergiendo. Su humanidad está despertando. Es hora de que cada ojo se abra a la luz de la divinidad en todas las cosas. Esto es algo aparte de la religión, y sin embargo, todo modo de pensamiento concerniente a quiénes son ustedes, qué es su planeta, y adónde los lleva la flecha del tiempo está llevando al momento de ahora al futuro. Este tiempo es para que ustedes reconozcan unos en otros las respuestas que buscan desde su interior, no de buscarlas en una fuente exterior, ni siquiera en lo que nosotros decimos como si fuera la verdad absoluta, aparte de cualquier cosa que ustedes consideran como su propia verdad. Pues la verdad es que nosotros no estamos separados de ustedes más que en tiempo y dimensión. A medida que se asientan en el futuro, también se asentarán en una nueva realidad, desde donde se efectuará nuestra eventual reunión.
El juego al que entraron cuando se unieron por primera vez a los jugadores sobre la Tierra se ha desarrollado volviéndose una misión para buscar y destruir a una melé general que conduce más precipitadamente a una realidad de aniquilación que se torna realidad. Hace mucho tiempo la civilización planetaria estuvo muy involucrada en el desarrollo eventual de su 'impasse' (callejón sin salida). Quienes gobiernan hoy en día no son diferentes de quienes destruyeron los edificios de las elevadas civilizaciones benevolentes de hace mucho tiempo.
Olvidados en la historia están los pueblos de un tiempo en el que cada individuo estaba involucrado en la construcción de una cultura pacífica y del bienestar para todos, y que fue relegada a la leyenda y el mito. Sus confines de su memoria no son capaces todavía de recolectar el espíritu de ese tiempo, y con las lecciones aprendidas de un tiempo de remembranza ustedes pueden reclamar su herencia como guardianes de una nueva era de luz. Han desaparecido las magníficas ciudades y esferas, exceptuando unos pocos vestigios que sobreviven, y se han ido quienes las honraron. Sin embargo, ustedes están aquí ahora y depende de ustedes recordar, erguirse en el centro de su propio mundo y poner a un lado finalmente el yugo de la impotencia que se había forjado para la humanidad en las sombras del pasado. Libres, ustedes pueden jugar, pueden crear de nuevo sin ser obstaculizados el juego,.que es precisamente a lo que les estamos ayudando.
Permítannos contarles una historia sobre el tipo de mundo que ustedes solían conocer, cuando sus seres eran jóvenes en este mundo y no sostenían el fuego de la luz perdida en su corazón como el único sitio que tenían donde resplandecer. Ustedes tuvieron alguna vez una civilización que brillaba con la brillantez de su propia luz y que era llevada como un respiro es llevado en su interior ahora. La luz brillaba en cada espacio que sostenía a su gente unida, y quemaba los ojos de una forma de pensamiento que se había convertido en un monstruo que amaba la oscuridad más que a sí mismo. Las palabras fueron destruidas cuando esta criatura se volvió adulto y se extinguió la luz de un mundo como había sido. ¿Sigue existiendo esta luz? .Ustedes saben que existe y que brilla sin interrupción en los campos de la unidad atemporal de la cual nace toda realidad. Y todavía es invisible, todavía atisba solamente, todavía crece y busca contactarse con esos seres de antaño que han regresado a este campo de juego para recordar y reclamar un lugar para la luz de nuevo para que repercuta a través de los portales vivientes de una inteligencia amorosa, que son ustedes. De nuevo, ustedes lo son. De nuevo, la luz se abre paso a través de la red de amplificadores individuales, modula la matriz-espacio de la esfera de existencia de la Tierra, y envuelve a todo un mundo en transformación, ardiendo, pero no destruido. Esperen un momento pues la chispa se ha establecido en el campo.
Ahora tienen la apertura que han estado buscando en el muro ciego de la opresión que ha caído como una cascada y ensombrecido todo intento de escalar a un punto más elevado de partida. Si tan sólo pueden alcanzar un punto lo suficientemente elevado en su trayectoria pueden proyectarse a sí mismos como pueblo a una totalmente nueva realidad. Desprovistos de lo que los ha retenido en su lugar, enfilados a su propia aniquilación, ustedes son capaces de volar libremente. Sólo tienen que saber cómo ver la apertura y cómo navegar sin problemas. Escuchen y vean si su oído interno asiente en acuerdo, al otro lado de la creencia condicionada.
Antes de que dejen ir la promesa de un nuevo mundo a su gusto depositándose a sí mismo en su matriz-espacio, deben aliviar sus coordenadas del entendimiento del paradigma frecuencial de la creencia en lo que "debe" suceder, si han de permitir los milagros. Si han de permitir que suceda el pleno florecimiento del impulso creativo humano, no debe haber rastro alguno. de nada preconcebido que limite su libre expresión. Inclusive las más elevada de las creencias puede actuar como una barrera al genio de alguna mente. Tan fácilmente como ustedes liberan su respiro cuando suspiran de alivio o se relajan, pueden dejar que las creencias caigan de su mente y se estrellen con un salpicón satisfactorio para el ser a sus pies. Liberen su mente, si han de liberarse a sí mismos. No es que no crean en nada, sino que liberen cualquier parámetro que condicione lo que están creyendo que todo es y lo que sería, y con eso obtendrían el estado de ser ilimitados.
Así como es en el interior, es también en el todo de todas las demás cosas, sin separación.
Palestina es un lugar que vive en el mundo de la paz y el perdón. Siria nunca ha tenido un descanso en su deseo de querer ayudar al mundo a tener su conocimiento interior. Irán nunca ha querido albergar a un demonio, y sus fundamentos tienen una fragancia que eleva el espíritu de la humanidad. Lemuria fue parte del tiempo perdido y vive en el recuerdo opalescente del eterno susurro del amor. Hyperborea ha perdido su amplitud, pero el ideal sigue vivo todavía y aguarda el regreso de la sanidad para interpolarse a sí mismo en el campo de la Tierra nuevamente como el hogar para una civilización nacida en las estrellas. La .Atlántida nunca se elevará como el lugar que fue alguna vez cuando cayó, aunque la esencia ha prevalecido y su ideal se ha secuenciado en la inmortalidad. No hay más daño que se pueda causar del que ya ha visitado el mundo. Los indígenas en todos lados tienen en las piezas rotas del pasado un fragmento de la verdad que muestra los rastros de una guerra sobre quienes deambulaban de estrella a estrella y llamaban a la Tierra la "dulce joya del Sol del Cielo". Si ustedes estuvieron allí de alguna forma, ¿recuerdan la afilada lanza lumínica que destrozó el domo cristalino de la paz de la Tierra? Las piezas destrozadas de ese mundo yacen en pilas de arena besadas por océanos de lágrimas, y no obstante el día no ha perdido las esperanzas de traer los derechos que fueron arrebatados de las manos de la Tierra Madre. No obstante, ningún hijo perdido del mundo está perdido de verdad para el alcance del amor de la madre. Y así es con ustedes ahora.
Cuando las legiones de los manipuladores de la Tierra y los negociantes de la paz se reúnan para decidir el destino de los seres vivos respirando el aire de la libertad, el planeta habrá tenido ya suficiente de sus juegos y abrirá en amplio sus alas al soplo de la luz. Ustedes habrán perdido el linaje de sus tiempos previos, pero la mente y el corazón de la leyenda viven en sus pueblos. Querida gente de la Tierra, permitan que llegue el día cuando el llanto se torne de pena a triunfo, cuando la única sombra que caiga sobre la vista viviente de la Tierra sea el fin de una larga noche y su recuerdo se torne parte de la leyenda. ¿Lo recordarán? Ustedes perderán el peso de la esclavitud, eso es de seguro. Cuando pierdan el recuerdo de los largos eones de tiempo en que la humanidad ha sido mantenida en un estándar de represión, ustedes habrán perdido la línea de un gran tesoro. Miren, el recuerdo de la luz los llevará a su lugar natural del poder y el amor les enseñará inclusive el perdón de los peores pecados. Pero solamente cuando los días de tormento y de dolor sean vistos como una verdad, pero sin permitir que perezcan en la desintegración y en el olvido, tendrán el recuerdo de un reino que ha enseñado a los pueblos de la Tierra a luchar por la verdad de quiénes son ustedes, y en ello encontrarán la energía para ser plenamente quienes ustedes han venido a ser en este juego. Nada se ha sacrificado que no se pueda recobrar, y no hay ningún trauma sin la eventual integración y la paz. Sepan esto y nunca permitan que el enojo nuble su juicio. Los días venideros traerán consigo grandes oportunidades para recalibrar su habilidad para ver más allá de sus limitaciones del juego Tierra, y para ver que el campo de juego yace mucho más allá de lo que creen que es todo. En realidad, ¡el todo del Todo aguarda a que sean conscientes!
Los dejamos ahora en paz, honrando plenamente una gente en la cúspide de los recuerdos, pues la historia será testigo. Sean fuertes interiormente y permitan que el mundo haga lo que quiera para crear el equilibrio que necesita para emerger con mayor facilidad en una dimensión más cómoda del ser. No tienen nada que temer, queridos míos, que no hayan dejado ir ya hace mucho tiempo. Una nueva realidad los aguarda. Encuéntrense con nosotros allí y redescubriremos su verdadera naturaleza.
Traducción: Gloria Mühlebach
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