Posee una eternidad para transitar todos y cada uno de estos planos/consciencia que lo componen en sus infinitas experiencias y tiempos fractales que transita.
En el cúmulo de esta humanidad, los participantes de la eternidad poseen tiempos diferentes y experiencias diferentes que colaboran con la totalidad, cada cual a su ritmo, y no es porque unos sean más rápidos y otros más lentos, pues así no se mide el tiempo, sino dependerá del tipo de experiencia elegida y sus muchas posibilidades. A mayor experiencia, mayor osadía...más expansión.
Por esto, cuando una información es dada, cada uno lo verá desde su perspectiva de sabiduría o ignorancia, pues el sabio significa que ha transitado muchos niveles de conciencia y posee una visión más amplia y elevada de esa información, en cuanto el que ignora tiene pocos recursos todavía a su entender y su entendimiento carece de información suficiente con la suma de sus propias distorsiones, propias del nivel que transita y que se encuentra en franca depuración.
Por esto debe experimentar mucho y aprender de esas experiencias para liberar los miedos o los velos que posee en su espacio de vida.
Los libros Sagrados fueron escritos en 9 niveles de conciencia, por esto muchos los desechan y otros los atesoran.
El Camino a transitar siempre es hacia lo alto, lo elevado y no dar por seguro o cierto todo lo que experimentamos como una meta final, sino como un tránsito más a la depuración de nuestro nivel de conciencia y/o comprensión.
El Ser humano posee una jerarquía evolutiva que se mide por la posición de su columna vertebral, por ello le cuesta mucho mantenerla en forma y sana, hasta que logra mediante sus experiencias a sostenerla perpendicular al plano terrestre. Asignación que le fuera dada para que transite la vida más allá de su materia, con los pies en la tierra y su cabeza en el cielo.
Las experiencias que transitan a través de esta columna vertebral tensionan al ser y lo hacen vulnerable hasta que logra mediante su esfuerzo mantener y sostener la conexión tierra-cielo, en una constante. Cuando llega el momento la fuerza vital de la Vida instalada en su origen, encuentra vía libre y comienza a ascender la Energía Kundalini, la que hará el contacto final del Cielo con la Tierra. Cuando esto sucede, la sabiduría fluye, la información de todo lo que es está a la mano y muchos utilizan ese canal para poner en palabras toda la información que por allí desciende.
Qué desciende?
Luz, y la Luz es información y alimento a la vez.
Esta transformación del Ser que está teniendo lugar ahora con mucha intensidad, perturba al cuerpo físico y lo presenta adolorido y con fuertes dolores que van desde la base de columna hasta la cabeza. Cada una de las vértebras está en un serio compromiso de mutación y duele...duele mucho, comprometiendo también a la sangre, fluído vital y combustible material, que muchas veces ejerce presión interna y crea algunos conflictos, como alta presión o baja presión arterial, dependiendo de si fluye o no en medio del tránsito de trasformación. Cuando encuentra bloqueos, que siempre son ancestrales, es decir, que cada uno de nosotros portamos el salvavidas de toda la cadena genética o corriente de vida, y cuando entra en funcionamiento el momentun depurativo, lo ancestral que debe ser depurado, pues no podemos dejar atrás lo ante-pasado, se hace presente y sentimos el cuerpo apaleado literalmente.
Ya saben que este proceso no puede evitarse, pero puede aliviarse, mediante respiraciones conscientes, armónicas; estados de silencio y meditación; baños de agua templada y algún aroma relajante, alimentación frugal, etc.
Cuanto más "deterioro" en apariencia transitamos, más elevados estamos siendo transportados por nuestra propia consciencia que posee un reloj despertador propio y nos conduce a espacios más más amplios de la misma consciencia. Muchos que no poseen esta visión ven como milagro la recuperación de ese cuerpo en mutación, cuando en realidad, no fueron las oraciones vertidas del afuera, aunque ayudan mucho a mantener el espacio del ser en depuración, pero no así su conciencia.
Esta última trae por escencia Divina todos los atributos propios de la Creación y también el modo y el tiempo en que hará su transformación y tarea escencial, como lo auténticamente sagrado de su naturaleza.
En este punto, nos posicionamos de manera cauta y silenciosa frente a lo que se presenta, sin buscar explicaciones específicas, pero "sabemos" y hemos dejado de creer.
Han desaparecido los...yo creo que...y nos comunicamos con el Yo SÉ. También hemos asumido que tenemos todavía mucho por saber o rescatar ese saber desde el recuerdo de nosotros mismos y no nos aventuramos desde la apariencia.
Reconocemos lo válido de lo falso como conocimiento y sabemos reconocer la Verdad de la mentira.
Qué es la Verdad? Aquello que es auténtico y sólo los que han llegado a este nivel de comprensión, saben y se conectan con lo genuino.
Qué es la mentira?
Todo aquello que posea reservas a través del temor y la distorsión que contrae y no expande.
Las razas que no han elevado su columna vertebral y por consecuencia no pueden elevar su energía Kundalini, son aquellas que están relacionadas con lo reptil, es decir, lo que repta, se arrastra y solo pueden liberar su instinto, que es la forma horizontal.
El Ser Humano al ganarse por derecho de consciecia, es decir, por experimentación y sentido de la Divinidad, una columna vertebral perpendicular, no debería temer a estas razas que se encuentran en un estado inferior de evolución, es como aquellas personas que ven una rata y gritan y salen corriendo de horror...porqué? Qué podría hacernos un animalito inferior a nosotros?
Cada estadío de consciencia posee su espacio y si alguno inferior ingresa al nuestro, es porque hemos bajado las vibraciones, caso contrario cada especie se moverá en su espacio vibracional.
Podríamos aplicar la Ley de la relatividad a esto y encajaría de manera perfecta. Esto es así porque define a todos los niveles de comprensión en su infinita variedad y fluctuación. No nos olvidemos que poseemos LIBRE ALBEDRÍO y estamos sujetos mediante nuestra misión o tarea, a transitar los diferentes niveles en pos del Servicio, como lo hacía el Maestro Jesús, que transitaba en medio de enfermos y para ello debía bajar a ese nivel de comprensión para luego elevar todo a su paso.
Nosotros estamos aprendiendo ese camino y todavía tenemos que aprender a soltar aquello que tomamos en pos de una sanación, y no porque lo tomemos para nosotros, sino como tarea, de allí la confusión como modo de nuestro aprendizaje. Muchas personas luego de una emisión de Luz se sienten con los síntomas de quien posee una distorsión o enfermedad, la cual pasado unos minutos y a veces horas, libera.
Ya vemos como unos y otros poseen diferentes visiones sobre una misma información.
No pierdan esta oportunidad...
En Amor y Fe
Mónica Puenzo
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