Es un tiempo victorioso para estar vivos.
Cuando pienso en esto, cualquier problema se vuelve pequeño.
Estamos ante la transformación más grande de conciencia que se ha visto en este planeta en 26.000 años.
Cuando recuerdo los nuevos acontecimientos: La llegada de una nueva era, alineaciones que se reúnen en el cielo para potenciar nuestras capacidades, cerrar el gran ciclo que predijeron los mayas, abrir la nueva puerta de la iluminación y recibir oleadas de energías que provienen del espacio… todo lo demás parece más pequeño.
¿Por qué hacernos problema de pequeñas cosas que parecen grandes? ¿Quién las magnifica?
Los miedos a avanzar… lo que nos han dicho, lo que creemos y creamos como única realidad. ¿Y si probamos con soltar absolutamente todo? ¿Y si pedimos a nuestra sabiduría superior desmagnetizar solo por un momento nuestro campo y sentirnos completamente libres para crear el mayor potencial para nuestras vidas? ¿Y si volvemos a soñar como cuando éramos niños?
No había preconceptos, no había miedo, solo un sentimiento genuino de SER. ¿Por qué lo perdimos? ¿Por qué creemos que no se puede recuperar?
Todo es pequeño cuando tomas conciencia y habitas la inmensidad en la que vives.
Nosotros magnificamos los hechos y los hacemos graves. ¿Y si comenzamos por quitarle carga emocional a los problemas y los vemos como lo que son?: OPORTUNIDADES
Todo lo que te sucede en la vida es una oportunidad para descubrir algo más.
Si todo fuera tan perfecto y equilibrado no tendríamos nada que nos impulse a buscar. Sin la piedra en el zapato jamás cambiaríamos el que llevamos puesto, porque sencillamente pensaríamos que eso es lo mejor. ¡Siempre hay más por aprender! ¡Siempre hay más para descubrir!
Observa los hechos desde afuera. Imagínate sentado/a en una ventana. Mira hacia afuera y pon allí lo que te pasa. Visualiza con atención. Piensa en la gravedad que tiene. Es justamente esto: GRAVEDAD. Tiene peso en ti, como el peso energético que hace aferrarnos a la tierra. Lo sientes anclado en ti. Debes quitarle el peso energético que tiene. Desmagnetiza la emoción, que significa llevarla a un punto neutral.
Traza intuitivamente un infinito en esa carga. Observa lo que sientes. ¿Es tan grave? ¿O tu conciencia creó la ilusión que lo es?
¿Qué es tan grave que hoy te impide vivir pleno/a y feliz? ¿Qué te quita el sueño? Traza un infinito desde tu conciencia y elimina la carga negativa.
Lo que al ser humano lo hace sufrir es el tiempo de espera que existe entre una realidad y la otra. No sabemos utilizar el tiempo a nuestro favor, ya que gracias al tiempo podemos experimentar. Ancla tu conciencia al tiempo presente y vive lo que tengas que vivir. No te cargues de ansiedad. Todos estamos destinados a transformarnos. Busca tu luz divina y refúgiate en ella. Espera. Sé paciente. Crea. Pide ayuda. Habla con tu ser superior. Pide guía a los ángeles y encuentra lo que amas en la vida.
En el camino de una vieja realidad a la nueva de luz, es cuando tenemos la oportunidad de crecer. No crecemos al llegar al nuevo estado, sino en el proceso de transformación que se produce en la transición.
Para transitar la realidad de luz hace falta valor, entendimiento, saber esperar, coraje para atravesar el río, y entusiasmo para seguir la ruta que nos conducirá al nuevo camino. Un verdadero guerrero no abandona lo que ama. Se dedica. Llena sus pensamientos con la posibilidad de ver los sueños concretados, y actúa en pos de ellos.
No basta con soñar despiertos. No basta con imaginar lo que queremos. Para que las grandes ideas se materialicen debemos llevarlas a la acción, hacer algo para edificarlas. Primero tiene forma en el campo de las ideas, pero luego, es el mago quien las baja. El que puede plasmarlas con total libertad y entusiasmo.
Disfruta de tus logros. Piensa en cuánta energía invertiste en cada cosa que has logrado. Corónate. No esperes que nadie más lo haga por ti. Se el primero en valorarte. El valor exterior vendrá cuando primero hayas consumado tu propia victoria y sientas que has triunfado.
No hagas nada para obtener réditos ajenos. Puedes ganar cualquier medalla, millones de diplomas pueden intentar hablar de lo que has hecho, pero si tú no lo dices desde tus sentimientos, todo será en vano.
Se feliz en cada acto. Cuando la obra termina, regresas a tu casa con lo vivido.
¿Qué es tan grave que hoy te impide vivir pleno/a y feliz? ¿Qué te quita el sueño? Traza un infinito desde tu conciencia y elimina la carga negativa.
Lo que al ser humano lo hace sufrir es el tiempo de espera que existe entre una realidad y la otra. No sabemos utilizar el tiempo a nuestro favor, ya que gracias al tiempo podemos experimentar. Ancla tu conciencia al tiempo presente y vive lo que tengas que vivir. No te cargues de ansiedad. Todos estamos destinados a transformarnos. Busca tu luz divina y refúgiate en ella. Espera. Sé paciente. Crea. Pide ayuda. Habla con tu ser superior. Pide guía a los ángeles y encuentra lo que amas en la vida.
En el camino de una vieja realidad a la nueva de luz, es cuando tenemos la oportunidad de crecer. No crecemos al llegar al nuevo estado, sino en el proceso de transformación que se produce en la transición.
Para transitar la realidad de luz hace falta valor, entendimiento, saber esperar, coraje para atravesar el río, y entusiasmo para seguir la ruta que nos conducirá al nuevo camino. Un verdadero guerrero no abandona lo que ama. Se dedica. Llena sus pensamientos con la posibilidad de ver los sueños concretados, y actúa en pos de ellos.
No basta con soñar despiertos. No basta con imaginar lo que queremos. Para que las grandes ideas se materialicen debemos llevarlas a la acción, hacer algo para edificarlas. Primero tiene forma en el campo de las ideas, pero luego, es el mago quien las baja. El que puede plasmarlas con total libertad y entusiasmo.
Disfruta de tus logros. Piensa en cuánta energía invertiste en cada cosa que has logrado. Corónate. No esperes que nadie más lo haga por ti. Se el primero en valorarte. El valor exterior vendrá cuando primero hayas consumado tu propia victoria y sientas que has triunfado.
No hagas nada para obtener réditos ajenos. Puedes ganar cualquier medalla, millones de diplomas pueden intentar hablar de lo que has hecho, pero si tú no lo dices desde tus sentimientos, todo será en vano.
Se feliz en cada acto. Cuando la obra termina, regresas a tu casa con lo vivido.
Recuerda: “Estamos en el mejor momento de la humanidad”
Conciencias se expanden como nunca antes. Niños que nacen recordando todo lo pasado. Grandes maestros han despertado para recordarnos el camino y lenguaje del hogar. Estamos en un ciclo de grandes cambios. ¿Quieres ser parte de él?
CAMBIA. Hazlo por ti. Solo por ti.
Comparte tus logros con tu semejante, más hazlo para compartir la sabiduría adquirida.
Valor es dejar al descubierto las sombras que te atormentaban. Sabiduría es comprender que siempre habrá algo nuevo que aprender.
Mientras caminemos, seremos caminantes del cielo encarnados. Mientras viajemos, seremos turistas en este pequeño espacio del universo.
Nuestra naturaleza es reconocer los bosques, observar, parar, disfrutar, expandir nuestros límites, buscar algo más, atravesar las crisis, sorprender, arriesgar, tener miedo y vencerlo, ir hacia adelante.
Todo desafío parece pequeño cuando miro el escenario en el que estoy hoy: Estoy viva/o en la era acuariana.
No creo que haya nada que pueda superar la magnífica idea que Dios tuvo al mandarme.
Y así es.
María José Bayard
Sitios oficiales:
www.simboloscuanticos.com
www.clavestonalespleyadianas.com
Así...
ResponderEliminarAsí debe ser...
En ese Gran Espejo de la Vida debemos vernos reflejados.
Si observamos las cosas o situaciones desde fuera, veremos si estamos atentos otra Realidad, una Realidad de Vivencias del Alma encarnada.
Gracias.
Un abrazo.