Muchos
estamos abrumados por esta nueva energía del COVID19 y en modo de
supervivencia. Se nos está preparando para un nuevo ritmo de vida. Conectémonos
entre nosotros y enviemos esa increíble energía que tenemos. Al hacerlo,
cubramos al planeta con un manto protector, uniendo los corazones de los
hombres en estos tiempos críticos. De a un corazón a la vez se puede sanar esta
energía, sanar cada parte de ella y comenzar a conectarla con la nuestra.
EL VIRUS NO
ES NUESTRO ENEMIGO. NO ES EL CHICO MALO DEL BARRIO. TIENE CONSCIENCIA PERO NO
SABE QUE NOS ESTÁ CAUSANDO DAÑO.
Vean la
belleza de esta forma de vida. La parte gris es un conjunto de números 1, la
parte anaranjada corresponde al número 2 y los hermosos triángulos rojos al
número 3. El COVID19 tiene consciencia. Viene del espacio exterior y no sabe
que nos está enfermando y en algunos casos, matando.
Tengamos
presente que estamos conectados con todas las formas de vida. Nos damos cuenta
al ver el amor incondicional que compartimos con los animales y que es
recíproco. Pero cuando se trata de un virus, tendemos a desplegar nuestra
energía negativa de inmediato, lo que alimenta al virus y lo vuelve más fuerte.
Eso es exactamente lo que está pasando ahora.
Son muchos
los virus que han aterrizado en el planeta, pero no se puede negar que este se
está expandiendo rápidamente. Es difícil trabajar con este virus porque sabemos
muy poco sobre él y la manera en que se transmite y aunque estamos utilizando
todas las tecnologías para ver qué es y cómo tratarlo, ni siquiera ha sido
totalmente identificado. Esto es un problema por muchos motivos, pero también
abre muchas oportunidades.
Aunque a
esta altura sea problemático, a la larga traerá cosas buenas. Por empezar, está
cambiando la composición de nuestra estructura celular. Y con lo que se está
descubriendo, estaremos en posición de mejorar nuestra capacidad natural para
adaptarnos.
Una de las
causas es que se esparció muy rápidamente es que no se dio aviso hasta tarde,
porque esto empezó hace varios meses y entró en el planeta hace unos cinco
años. Interactuó con otra cosa que activó todo el proceso y lo puso en
movimiento. Lo bueno es que tiene una tasa de mortalidad baja. Lo interesante
es que este virus no afecta a los niños, y en este momento están llegando
muchísimos niños evolucionados al planeta.
El grupo
dice que muchas personas están volviendo al Hogar para formar equipos para
recibir a las personas que hacen su transición e incluso para ayudar con la
energía desde el otro lado del velo. Y no se están yendo solo las personas,
también los animales, los insectos (El grupo no los llama insectos, sino
sencillamente seres con otra vibración). Todos ellos son parte del mismo
organismo viviente y parecen querer preguntarnos si hemos descubierto los
códigos. Siete u ocho seres humanos lo han hecho, pero El grupo no ha elaborado
más sobre el tema.
Al virus hay
que enviarle amor. Cuanto más elevemos su vibración, más elevaremos su
percepción, porque est´´a tan desorientado y temeroso como los seres humanos y
no sabe qué sucede. Es una entidad viva que respira tal como nosotros, tal como
la Tierra, como nuestros animales, como nuestro cristal preferido. Todos estos
procesos están vibrando a distintos niveles.
Su
crecimiento veloz atrae nuestra atención y pronto comenzaremos a ver las
conexiones. Sin duda habrá personas que se contagiarán rápidamente. Hay lugares
que no han sido afectados mayormente, aunque el número de contagiados sea mayor
que el detectado. Lo interesante es que el COVID19 puede ser atenuado, puede
ser erradicado y pueden aparecer vacunas para prevenir su embestida. Los
barbijos N95 y N99 solo deben ser utilizados por quienes ya lo han contraído.
Los demás pueden usar guantes en lugares de mucho contagio porque el virus vive
varias horas sobre las superficies que tocan las personas infectadas. Pero lo
más temible no es el virus sino el miedo, que baja las defensas. En un
organismo alcalino y saludable, no tendria que haber problemas.
El grupo, a
través de Merlia, nos pide que por un momento amemos al COVID19
incondicionalmente. Enviémosle luz. Conectémonos con este nuevo nivel
vibratorio. Aspiremos y bajemos la vibración de nuestro ser intencionalmente
por unos momentos mientras nos comunicamos con este ser. Hay otra cosa que no
hemos notado y es que si lo vemos como un ser, notaremos que está muy
atemorizado. Le está costando mucho sobrevivir, está en modo de supervivencia.
Podemos
comunicarnos dándole amor y como contrapartida, creamos así una resistencia
natural a sus aspectos negativos. De ese modo, si penetra en nosotros, seremos
capaces de expulsarlo. Entrará y saldrá como los demás. Si el virus se da
cuenta de lo que sucede, comenzará a armonizarse en lugar de causar
dificultades y eso traerá la evolución que estaba prevista.
Aspiren y
conéctense con el reino angelical, con vibraciones superiores a aquellas con
las que están conectados ahora. Conéctense con la densidad del reino mineral
mismo. Conéctense más y más y luego conéctense con el virus. Con la energía
global que tienen los seres humanos, el virus cambiará.
Envíenle
energía y conexión humana. Ahora aspiren profundamente y envíenle
concienciación humana a este ser frente a ustedes.
Aspiren y
retiren esta energía. Este es un tiempo de adaptación. Visualicen que a medida
que esta forma de vida comprende, comienza a dejar de ser un problema.
Visualicen que esto ocurre incluso en las cuatro semanas próximas. Obsérvelo a
medida que comienza a atenuarse.
Muchos están
trabajando en esto y desde el otro lado del velo les están enviando ideas.
Aparecerán vacunas, pero siempre será en armonía con el ser mismo, porque el
COVID19 no es un chico malo, es solo un chico, así de simple.
ESPAVO
(saludo lemuriano que significa: Gracias por asumir tu poder)
enviado por Susana Peralta
