Queridos hermanos, yo soy el Melquisedec
del Aire que conocen con el nombre de Jiddu Krishnamurti.
Antes de entregarles algunas palabras, que serán transmisoras de un estado de
percepción directa muy concreto, haremos unos instantes de silencio…
Lo que expresé durante mi última encarnación
encuentra en estos últimos tiempos su total manifestación, realización y
comprensión. En los momentos donde absolutamente todas las estructuras de esta
dimensión cerrada colapsan y se desintegran: las estructuras de la sociedad,
las estructuras de la personalidad, las estructuras de la consciencia limitada.
Este colapso general desembocará como saben en el caos, para permitir el
nacimiento de un nuevo estado, el nacimiento de lo que hasta ahora ha sido
desconocido.
En un mundo donde la Verdad se había reducido a
simples simbolismos, a simples convenciones, a simples acuerdos sin una
correspondencia con la realidad de vuestra vivencia; hoy, por la emergencia, la
urgencia y la radicalidad de los tiempos, están abocados sin elección a
afrontar la realidad última de vuestra Consciencia. Y esta es la Percepción
Directa y Libre, más allá de toda referencia, de toda emoción, de todo
pensamiento, de toda proyección, más allá del tiempo y de cualquier espacio.
La urgencia de los instantes, ya sea por la
alegría, por la tristeza, por el amor, por el miedo, la beatitud o el ansia,
los llevará irrevocablemente al cara a cara con “Lo Que Es”.
Y “Lo Que Es” no tiene nada que ver con ninguna condición, con ninguna
situación, con ninguna emoción.
Ningún sistema de creencias los salvará, ningún
sistema social los llevará a la libertad. Cuando la Consciencia se libere de
toda palabra, de toda referencia externa, de toda autoridad externa, de toda
vibración, ustedes entrarán en el estado que hoy llamaré el Estado de Sorpresa.
Estado de Sorpresa, el instante donde recuperan
la Libertad y la Autonomía que les corresponden como Consciencia Libre. Estado
de Sorpresa, de Percepción Directa donde ninguna referencia del pasado, de la
historia personal ni colectiva puede influenciar. Estado de Sorpresa y
Percepción Libre, donde ningún condicionante exterior proveniente de las
fuerzas de control mental, de las fuerzas de poder de este mundo y de las
fuerzas espirituales invertidas de este mundo los puede afectar.
Así se revela el estado de la Percepción
Directa, el Estado de Sorpresa que es la Esencia de todos y cada uno de
ustedes, por muy alejados que les parezca estar de vuestra Integridad y vuestra
Libertad.
Esta es la restauración que ustedes viven ahora de la Consciencia Libre y
multidimensional, la restauración del estado más allá de toda Consciencia, más
allá de toda percepción, más allá de todo observador y observado.
Ya no hay observador, tampoco nada que
observar. Lo observado y el observador se diluyen en ellos mismos dando paso al
Amor Infinito, a la Luz sin fin, sin límite, sin ninguna condición.
Acojámonos unos instantes, entremos juntos en
el Estado de Sorpresa…
Yo soy el Melquisedec del Aire que conocen con
el nombre de Jiddu Krishnamurti. Hoy hablando en nombre de los 24 Ancianos.
Transmitido per Silah Pere Sicart
Traducido por Amparo Iribas
Revisado por Silah Pere
Sicart
