domingo, 18 de diciembre de 2016
MIKAËL 13 DE DICIEMBRE DEL 2016
Soy Mikaël, Príncipe y Regente de las Milicias Celestestiales. Bien amados hijos de la ley del Uno, honro y saludo vuestra Presencia.
…Silencio…
Hace ahora muchos meses que surco vuestros cielos para acabar de permeabilizar el estado de la Tierra. La obra de los dragones de la Tierra os fue explicada, mi intervención en el seno de vuestros cielos también. Hoy, vengo a arar en cierto modo vuestra carne. Como tercer término de la Nueva Eucaristía, como Cristo-Mikaël, mi espada está ahora en vosotros; que os haya atravesado el corazón, que esté a vuestra izquierda, ésta viene a cortar en vosotros lo que tiene que serlo.
Durante este período en que el Fuego Ígneo se despliega en la totalidad de la tierra como en la totalidad de la humanidad, estoy a vuestros lados y en vosotros, obrando incansablemente en cada uno de vosotros con el fin de cortar lo que fue visto, lo que es atravesado, liberando ante vosotros la vía para la instalación de vuestra eternidad.
En esta acción, y por el hecho de la desaparición casi completa de todos los velos aislantes del planeta y de vuestra conciencia, os es posible invocarme, con el fin de asistiros a cortar lo que debe serlo. Desde ahora no necesitáis para entrar en resonancia con mi acción y mi Presencia, ni de sellos, ni de cristales, ni de nada más que la intención de vuestro corazón, por el hecho de nuestra proximidad, ilustrada ya desde hace muchos años por vuestros diversos y variados contactos con las fuerzas de la Confederación Intergaláctica de los Mundos Libres, como con los pueblos de la naturaleza.
La totalidad de la vibración llamada Arcangélica, así como nuestras conciencias, están a vuestra total disposición, como dije, para asistiros, a cada uno de vosotros, según vuestras peticiones y según nuestras especificidades. Esta ayuda se inscribe directamente en la acción del Fuego Ígneo, viniendo en cierto modo para canalizar el Fuego Ígneo ahí donde sea necesario, ayudándoos a asentaros vosotros mismos en el Corazón del Corazón.
Sea cual sea la circunstancia del cuerpo efímero y del cuerpo sutil, como para una circunstancia que dependa de vuestro cuerpo físico, de la misma manera que los pueblos de la naturaleza han podido aportaros unas ayudas precisas, en lo que a mí atañe, mi espada de Fuego de la Verdad puede dirigir y orientar el Fuego Ígneo en vosotros, en la medida en que os deis cuenta de lo que en vosotros sucede, en la medida en que acogéis y aceptáis vuestro último cambio de vista hacia el Corazón del Corazón.
Así como se dijo por muchas voces, la totalidad de las antiguas y recientes profecías se realizan ante vuestros mismos ojos. No voy a repasar la totalidad de los acontecimientos que ocurren tanto exteriormente, sino también, como sabéis, interiormente. El despliegue del Fuego Ígneo en vosotros, encendiendo en cierto modo vuestra Merkabah interdimensional personal, se realiza de la misma manera al nivel del manto de la Tierra. La totalidad de la información del núcleo cristalino de la Tierra es ahora difundida por todas partes en la superficie de la tierra, en una frecuencia que todavía no os es audible, pero que lo será efectivamente muy rápidamente. Así la Tierra vive también su Fuego Ígneo, ya no de su liberación, que fue tramitada hace ya cinco años, sino mucho más en su ascensión final y también colectiva, en relación con la totalidad de las conciencias de la Tierra.
Nadie conoce la fecha, pero el proceso está tramitado, sucede en este mismísimo momento, desde hace ya muchos meses, y alcanzará su apogeo en muy poco tiempo, lo que marca para muchos de vosotros, sea cual sea vuestro emplazamiento y vuestra conciencia en esta tierra, un despertar en cierto modo saludable acerca de la comprensión, la intuición o el instinto de lo que va a ocurrir y ya ocurre en la tierra, lo que fue anunciado en un plano muy global hace muchos años por el guía Azul de Sirius llamado Sereti. Os reenvío pues a esas informaciones tal y como os fueron comunicadas hace muchos años.
Los mecanismos de la ascensión de la Tierra, lo sabéis, fueron primero preparados por la liberación de la Tierra en sí, y luego por la expansión de la resonancia del núcleo cristalino de la Tierra, conectándoos con el origen de la materia de esta Tierra, es decir con Sirius.
El conjunto de vuestro sistema solar, como lo había anunciado Seréti, es consumado por el Fuego Ígneo, al cual se conjugarán otras fuentes de Fuegos Ígneos procedentes de la alineación del sistema solar con el centro galáctico, y también en relación con una ola de Luz procedente de diferentes estrellas, y sin embargo muy lejanas en término espacial de 3ª dimensión de vuestro sistema solar. Por supuesto que el Fuego Ígneo impacta desde hace muchos años el conjunto de los cuerpos celestes presentes en el seno de este sistema solar. La aproximación de Nibiru ya tiene unos efectos consecuentes sobre la liberación de la Tierra y la ascensión de vuestro sol en su nueva dimensión de gigante roja.
La re-absorción de Mercurio, correspondiendo en vosotros a la desaparición de la mente, ocurre en este mismo momento, es decir, más exactamente, Mercurio ha empezado su migración hacia unas esferas dimensionales mucho más elevadas de las que os son actualmente accesibles. La luminosidad de los cuerpos celestes planetarios inscritos en este sistema solar es tal, que la iluminación se vuelve cada vez más evidente con lo que vuestros ojos pueden ver, lo que vuestros instrumentos pueden observar, aunque no sea realmente difundido al nivel de las masas.
La multiplicación de mi Presencia en el seno de vuestros cielos, ilustrada como sabéis por los innumerables meteoritos grabados por vuestras cámaras de todo el mundo, anticipa dentro de poco tiempo el impacto de estas fuerzas sobre vuestra conciencia, pero también en el manto de la Tierra, y ya no solamente en el seno de la atmósfera terrestre. El cielo se desgarra, los satélites artificiales ya no tienen razón de ser en el seno de la Libertad reencontrada. Así que vigilad la Luna, vigilad los planetas de vuestro sistema solar; a simple vista, por la noche, veréis unas modificaciones sin igual en vuestros cielos, al igual que están presentes en vuestro cuerpo de carne y en vuestros cuerpos sutiles.
El hecho de llamarme incrementará en vosotros el Fuego Ígneo que, os lo recuerdo, es el elemento motor de vuestra ascensión y de vuestra liberación colectiva. Apelar a mi emanación, a mi Presencia, actuará sobre el corazón, en el Corazón del Corazón, para permitir una fácil instalación del Fuego Ígneo en vuestro Corazón del Corazón y de manifestar el Corazón Ascensional y la activación de lo que fue nombrada la Lemniscata sagrada.
Apelar a mí, apelar a los movimientos que fueron dados hace mucho tiempo por los Ancianos, referentes a los movimientos de la cabeza que reproducen una lemniscata horizontal, son unos elementos que permiten, al nivel de vuestro cuerpo, ya no de actuar sobre alguna memoria, ya no de actuar sobre el personaje efímero, sino directamente sobre el mecanismo de la Ascensión, activando vuestro corazón por la Corona Ascensional, activando y elevando vuestra Merkabah interdimensional hasta la Fuente de Cristal llamada también el 13º cuerpo, y permitiéndoos no estar fijados más en el seno de alguna forma, que son las condiciones previas a la Resurrección colectiva en el seno de los espacios de Libertad después de la Llamada de María.
Como fue tradicionalmente mi función y mi papel en las enseñanzas divulgadas desde hace mucho tiempo en la tierra, soy tradicionalmente representado como él que derrota al dragón – no el dragón de Luz sino los Arcontes. Soy también él, por resonancia y afinidad, él que en vosotros, más allá del mecanismo que acabo de describir, facilita, ya no las últimas reversiones ligadas, os lo recuerdo, al Arcángel Uriel, sino más bien a la instalación de la visión interior, de la visión de la Verdad, de la visión del Fuego en sí y de sus acciones en los diferentes planos posibles donde éste actúa.
Apelar a mí, invocarme, permite estabilizar la Nueva Eucaristía y sellar en vosotros la nueva alianza a la Libertad incondicional del Espíritu. La que fue nombrada la Nueva Eucaristía, en septiembre del año 2009, está hoy en un punto de activación tal que, como lo percibís, los lazos formales con vuestro cuerpo, con vuestra mente, con vuestra historia y con lo que es nombrado el cuerpo causal, están cada vez más aflojados y distendidos, permitiendo, tal y como hice en el cielo, de realizar esta alquimia y de ayudaros a asentaros en el corazón, aunque sabéis pertinentemente que sólo vosotros y únicamente vosotros podéis hacerlo. No vengo pues a realizar este trabajo sino a proponeros una iluminación, por mi espada, de lo que debe serlo durante estos tiempos particulares de Gracia extrema.
Este período del Adviento y este mes de diciembre es para vosotros la ocasión, siguiendo los ritmos de la naturaleza, de entrar en más profundidad para encontraros, para volver a encontraros, y dejar emerger la Felicidad y la Paz, la Luz, la Verdad y el Amor.
Sea cual sea el estado de aparición de vuestro Fuego Ígneo, que no haya nacido todavía, o que esté presente al nivel de los pies o en los diferentes niveles laterales de vuestro cuerpo físico, importa poco porque puedo ahora liberar, si puedo decirlo así, la presencia de la Nueva Eucaristía, la presencia de la Unidad, la presencia del Absoluto, ahí mismo donde estáis.
El conjunto de las fuerzas de la Confederación Intergaláctica de los Mundos Libres, y lo sabéis y lo veis, aunque estén camuflados, está también presente de manera importante y cada vez más extensiva muy cerca de vosotros, cercanos a la tierra, en la atmósfera terrestre. Como sabéis también, la totalidad de los preparativos de esta última fase de la alquimia está tramitada. Nos queda, a nosotros como a vosotros, sea cual sea nuestra dimensión de procedencia, a acoger el momento decidido por la comunión de los diferentes elementos presentes, que no depende ni de vuestra voluntad, ni de nuestra acción, ni siquiera de algún calendario astronómico, sino más bien de la resultante de la totalidad de estas interacciones.
Sin embargo, la aproximación de Hercobulus es cada vez más sentida y es también responsable, al igual que mi Fuego Ígneo que surca vuestros cielos, de unas modificaciones a veces brutales ocurriendo en el seno de vuestra vida efímera. Atañe tanto a las manifestaciones del Fuego como a los acontecimientos sobreviniendo de manera inesperada, en vuestra vida, con vuestro cuerpo, con vuestras relaciones, pues en todas las áreas de vuestro personaje efímero inscrito en el seno de una historia.
La unión, es el término más exacto, entre los pilares de la Merkabah interdimensional con la Nueva Eucaristía, con la Lemniscata sagrada, por la Gracia del Fuego Ígneo, os da a vivir de manera cada vez más fácil, aunque todavía no sea el caso en este preciso momento, una facultad todavía más grande y más amplia a encontraros en la Infinita Presencia o en el Absoluto, incluso antes de la Llamada de María. Este período de Gracia es esencial, no para vosotros que tenéis asegurada la Liberación, sino para el conjunto de hermanos y hermanas que todavía duermen, que no ven venir nada y no perciben nada, para que en el momento en que éstos vivan la realidad, como dije, de manera lógica, de manera intuitiva o de manera instintiva, esto no hace ninguna diferencia, en ese momento, vuestra presencia con los pies en la tierra, sea cual sea vuestro estado previo a la Llamada de María, es fundamental para vuestro servicio en el Corazón del Corazón para el conjunto de la humanidad.
Así que llamadme, para vosotros, para cualquier situación, para cualquier relación donde no os parece haber una iluminación lo suficientemente justa, no para comprender sino más bien para giraros hacia la mirada interior de la Eternidad. Esta acción será en general extremadamente rápida, extremadamente brutal, y extremadamente eficaz. No veáis ahí una posible mejora de algún estado efímero que atañe a vuestro cuerpo, a vuestras relaciones, o a cualquier aspecto de vuestra vida efímera, sino simplemente la liberación de lo que puede frenar, por las costumbres, por los últimos condicionamientos de oposición en el seno de vuestras estructuras inconscientes, limitando la instalación de la Infinita Presencia y del Absoluto, si puedo decirlo así, de manera definitiva.
Estáis pues invitados, no a pedirme alguna sanación, esto no me atañe, si no es la sanación definitiva del efímero por vuestra instalación en el seno de la Eternidad. Cuando os parezca no poder estar en el corazón, cuando os parezca estar superados por vuestro propio mental o por el sufrimiento que sea, llamadme. Una vez más, no resolveré el sufrimiento, no es mi objetivo, pero os permitiré aliviar vuestro paso desde el efímero hasta la Eternidad, si tal es por supuesto vuestra destinación, vuestro deseo.
Así la espada de la Verdad, no sólo ha atravesado vuestro corazón desde delante hacia atrás, liberando completamente el flujo de la Luz emanando de vuestro Corazón del Corazón, no obstante éste, por unas razones que os escapan, no ha aparecido siempre a la conciencia global. Es en estos casos que me permitiré, a petición vuestra, de realizar la alquimia, como dije, entre los pilares laterales de la Merkabah interdimensional individual con los tres puntos de la Nueva Eucaristía, así como con la Lemniscata sagrada, permitiendo a vuestra conciencia global poder vivir la efusión de la Fuente de Cristal, permitiéndoos, si estáis de acuerdo, de facilitar lo que os puede parecer ser el paso de la última puerta.
También, sea cual sea el lugar, sea cual sea la hora, sea cual sea vuestro estado, de despertar o de sueño, o de Libertad, esto no hará, por el hecho de nuestra proximidad, ninguna diferencia entre vosotros. Acordaos bien que no estoy ahí para mejorar algún estado efímero, sino más bien para trascender y ayudaros a instalaros justamente en el Corazón del Corazón, para ver realmente y concretamente la totalidad de lo efímero por lo que es, es decir una ilusión.
En cuanto toque la tierra, de una manera tal que nadie podrá discutirlo, con unos acontecimientos geofísicos importantes, podréis en ese momento, y más que nunca, beneficiaros de una ayuda todavía más directa, permitiendo, por el encendido del punto que resuena a mi Presencia en el seno de la nueva Tri-Unidad, hacer pasar, si puedo decirlo así, la vibración de vuestro corazón al estado ígneo, en cuanto vosotros mismos habéis pasado y franqueado lo que os aparecía ser la última puerta, ahí donde se sitúa el guardián del umbral. Derrotaré pues el dragón en vosotros, derrotaré pues la totalidad de las funciones ligadas al efímero y al encierro, tal y como lo vivís desde hace milenios, dándoos a ver y a probar los frutos de la Libertad incluso antes de la Llamada de María. Ésta, en términos terrestres, no podrá ser demasiado aplazada, en función por supuesto de la visibilidad de las señales celestes, pero también de la Tierra después de mi primer acto cuando sacuda la tierra y los mares.
La fecha no puede sernos conocida, pero que sepáis simplemente que por el hecho de nuestra proximidad, esta fecha es infinitamente próxima. No puedo con ello ni deducírosla, ni dárosla sino invitaros a inclinaros todavía más hacia vuestro corazón eterno, hacia la percepción de lo que sucede en vosotros, hacia la atención que dais al proceso que está ocurriendo sobre la pantalla de vuestra vida efímera. Porque es en los elementos ocurriendo en vuestro efímero que se encuentran también las vías de paso, si puedo decirlo así, para instalar vuestra eternidad de manera definitiva, es decir a estar en la Infinita Presencia o devenir, incluso antes de la Llamada de María, el Liberado viviente, ya no ligado a la Onda de Vida sino directamente al Fuego Ígneo.
No necesitáis ningún ritual. Vuestra conciencia, en un momento de lucidez interior, es ampliamente suficiente para realizar nuestro contacto y vuestra llamada. Como dije, mi respuesta será evidente, no por ningún aspecto visual necesariamente, ni siquiera perceptible, sino más bien por la acción directa sobre vuestras diferentes estructuras vibrales nombradas Estrellas o Puertas, así como sobre ciertos puntos más periféricos de vuestro cuerpo nombrados las extremidades, es decir las manos, los pies, y la pequeña Corona de la cabeza. La pequeña Corona de la cabeza es la imagen del chacra del corazón; la alquimia de la Corona del corazón y de la Corona de la cabeza es esencial para liberar de manera última a los cuatro Jinetes, los cuatro Hayot Ha Kodesh, con el fin de alcanzar el arquetipo que es, os lo recuerdo, el Éter de 5ª dimensión.
El Fuego Ígneo es el Amor condensado en forma de Luz y de Fuego. El Fuego Ígneo quema y quemará de manera cada vez más física, si puedo decirlo así, el conjunto de lo que es efímero, no para disolverlo en la nada o en el Absoluto, sino que será regenerado, si es vuestro destino, en una forma refinada mucho más sutil donde el cuerpo de Êtreté será revelado durante la Llamada de María, que conservéis vuestro cuerpo de carne o no. Vuestro cuerpo de carne aparecerá entonces como duplicado por el cuerpo de Êtreté en superposición, dándoos acceso a vuestra forma de origen estelar. Esto ya apareció en parte para algunos de vosotros, cuando os fue posible ver vuestros orígenes o vuestros linajes, para vosotros como para vuestros hermanos y hermanas.
El soplo del dragón, asimilable a la espada de la Verdad que manejo, se conjuga ahora en la totalidad de la tierra. El trabajo de preparación de la ascensión de la Tierra realizado por los dragones, que sea sobre el control de las corrientes magmáticas presentes al nivel de los volcanes – junto con los Arcturianos–, que sea sobre el aligeramiento de las tensiones de la superficie por los agujeros apareciendo por todas partes en el planeta, que sea en los contactos de diferentes maneras de los dragones con vosotros en el seno de la naturaleza, demuestra de manera indudable que todo lo que fue anunciado acontece efectivamente y concretamente en este mismísimo momento. La estructuración y la arquitectura de este proceso no dependen ni de vosotros, ni de nosotros, sino que al igual que para la aproximación de Hercobulus, va a seguir, diría yo, lo que habéis nombrado las líneas de menor resistencia, o si preferís, la Fluidez de la Unidad.
La presencia de Cristo en vuestra conciencia, la presencia de María a la cabeza de la Confederación Intergaláctica presente en vuestra atmósfera, así como el conjunto de lo que fue nombrado en su momento la Emanación Arcangélica, el Cónclave Arcangélico, es hoy accesible en otra octava. Es la que vivís en este momento, los unos y los otros, en particular en resonancia con la Nueva Eucaristía o la nueva alianza. Lo que se realiza no es solamente la alquimia de vuestro corazón sino más bien, como fue nombrado, el Corazón Ascensional, es decir la elevación de vuestro corazón, de vuestra eternidad, hacia las esferas de la Eternidad.
Tal y como os dijo Cristo, tal y como os dijeron algunos Arcángeles, algunos Ancianos, algunas Estrellas, más que nunca hoy el «Velad y rezad» es una acción de Gracia que os conecta a vuestra Fuente de Cristal de una manera también más constante, más permanente, hasta el momento en que esta conexión sea permanente, viniendo a irradiar sobre las dos Coronas de la cabeza y permitiendo a vuestro Corazón Ascensional elevarse entre los pilares de la Merkabah interdimensional, como dije hasta la Fuente de Cristal. Cosa que se realizará, si no tenéis la Gracia de vivirlo durante este período, es exactamente el mismo proceso que será generado por la Llamada de María. No por María misma, que os avisa tres días antes, sino porque las circunstancias de la reunión del cielo y de la Tierra estarán perfectamente en armonía y en adecuación.
El cielo toca la Tierra. En un momento dado, el cielo fusionará y fecundará la Tierra. La consecuencia será, por supuesto, la elevación del conjunto de este sistema solar en su nueva dimensión, en el seno de una nueva organización astronómica y una nueva organización de vida. Que seáis residentes de esta tierra, de este sistema solar, o que volváis a experimentar vuestra conciencia en los mundos libres, en el Absoluto o en la Fuente, no cambia nada.
Así que cada uno de vosotros hoy es el maestro de obra de la Luz, maestro de obra en sí pero también maestro de obra para el colectivo. Acordaos, como fue enunciado, no se trata de discurso, no se trata de gestos, sino que se trata de la emanación espontánea de vuestro corazón, sea cual sea lo que tengáis que hacer, sea cual sean vuestras ocupaciones, sea cual sean vuestras funciones en el seno de lo efímero. Un momento dado, si vivís lo que acabo de exponer, veréis claramente lo que es efímero y lo que sois, llevándoos a veces a reposicionaros, de manera fuerte, en otras circunstancias del efímero. No sois vosotros quienes lo decidiréis, tampoco podréis oponeros a ello, sino que será el efecto de los lazos cortados por la espada de la Verdad, por la espada de Luz.
Una vez más, este proceso no está destinado a todo el mundo, pero todo el mundo en esta tierra, dormido o despierto, o liberado, tiene la oportunidad, durante este período, de pedirlo y repetir esta petición invocándome, llamándome. No existe nada que vuestro Amor, junto con mi Presencia, no pueda superar, eliminar y trascender.
…Silencio…
Existe pues, como podéis verlo en vuestra vida como en la tierra, una intensificación de los procesos en curso, unas apariciones de fenómenos desconocidos, tanto en vuestros cielos como en la tierra, que traducen esta nueva apertura a las radiaciones cósmicas más lejanas del centro galáctico, pero también de algunas estrellas, bombardeándoos literalmente de radiaciones cósmicas y que para nosotros son naturales. Es en el marco de esta apertura de los últimos cerrojos de la tierra al nivel de la atmósfera terrestre, de la ionosfera terrestre, que actuamos ahora, bien evidentemente por resonancia, no sólo en vuestros cielos sino también en vuestras envolturas sutiles, en vuestros auras y en vuestros cuerpos sutiles.
Como lo podéis constatar, las innumerables modificaciones, psicológicas, fisiológicas, aparecen. Sólo podemos aconsejaros acompañarlas con facilidad, sin resistir. Si vuestro cuerpo manifiesta un elemento nuevo, por supuesto que es lógico en primer lugar averiguar si hay una anomalía médica. Y en un segundo lugar, y será evidente para vosotros, las modificaciones que vivís y que transforman vuestra psicología y vuestra fisiología efímera sólo son la ilustración y el testimonio de la instalación de vuestra eternidad – sean cuales sean las manifestaciones, sin excepción alguna. Por supuesto que os incumbe, si el cuerpo es el destinatario de esta alquimia, de ocuparos de el. Si esto ocurre a nivel psicológico, os incumbe buscar las líneas de menor resistencia, seguir la Fluidez de la Unidad y superar cualquier voluntad personal, cualquier restablecimiento hacia un estado anterior. Ahí también, en estas condiciones, llamadme.
…Silencio…
Durante este preciso período del tiempo de la Tierra, los velos os permiten desde hace algún tiempo, estar tal vez confrontados (o visitados) por unas inteligencias no humanas que se acercan durante vuestras meditaciones, durante la noche, o tal vez durante unos momentos privilegiados de los cuales no sois conscientes. Sea cual sea la forma, sea cual sea la densidad de estos contactos y dondequiera que se sitúen, sólo traducen la desaparición de los velos y vuestra capacidad a ver, a percibir, lo que hasta ahora no os era perceptible.
En el seno de estos encuentros que calificaría de fortuitos, es decir no las deseadas con los pueblos de la naturaleza, yendo ahí o llamándoles, ni siquiera las que os he propuesto, es decir de invocarme o de llamarme, sino más bien de manera inopinada, si puedo decirlo así, e independiente de vuestra voluntad. Esos nuevos tipos de comuniones no traducen de ninguna manera vuestro devenir o vuestro emplazamiento vibral, sino simplemente un elemento de encuentro y de comunión que os es propuesto, a merced de los desplazamientos de unos y de otros, los vuestros como los nuestros. En efecto, en cuanto haya Luz, no cualquier luz sino que en cuanto el Fuego Ígneo alcanza el corazón, os volvéis visibles y os volvéis visitables para cualquier inteligencia de la Luz libre.
No os preocupéis. Sea cual sea la forma que os visita, sea cual sea la energía, sea cual sea la conciencia que se manifiesta, en ningún caso una fuerza adversa, en ningún caso un Arconte o cualquier forma opuesta a la Luz no puede, en ese momento, ni encontraros, ni visitaros, ni siquiera intercambiar algo con vosotros, porque las fuerzas adversas, como las nombráis en este plano, tienen un miedo terrible a la Luz y al Amor, y esto lo sabéis. Así que esos encuentros, que sea con una forma humanoide, que sean unas entidades que os visitan, serán cada vez más importantes conforme los días pasan.
Acordaos también de que los profetas habían anunciado que en el momento de la Llamada de María y de los tres días de estasis, fue especificado que mil demonios aullarán por la noche. No son unos demonios que son liberados de las profundidades de la tierra, sino simplemente los que estaban presentes con vosotros, alrededor vuestro, de manera totalmente invisible desde hace miles de años. Si vuestro Corazón Ascensional está activo, entonces esas presencias no podrán ni acercarse a vosotros, ni molestaros de ninguna manera. Si éstas tuviesen que manifestarse a vosotros antes de la Llamada de María, simplemente os basta con apelar a mi emanación y a mi Presencia. Os lo recuerdo, en el seno de la Libertad y en el seno de la Unidad, no podéis entrar en combate con nada, porque ni es vuestra atribución, ni siquiera es vuestra función en el seno de la Unidad.
Veáis lo que veáis, percibáis lo que percibáis, la única certeza, sobre todo en esos momentos, es vuestro corazón, vuestra eternidad y la mirada interior. Así, sea cual sea lo que se manifieste, no tengáis miedo. Poneos en el corazón. No intentéis luchar, no intentéis proyectar ninguna luz, sed simplemente lo que sois en eternidad. Si no os es posible, llamadme y haré lo que hay que hacer en ese momento. Esta regla es estrictamente la misma para todo el mundo en la Tierra, os lo dije, dormido, despierto o liberado. Esta oferta concierne también, y bien evidentemente son ellos los que más lo necesitarán, el conjunto de lo que fue nombrado los chicos malos de la tierra, porque mi acción en ese momento forma parte para ellos de las últimas Gracias de la Luz preparadas por María, y que se manifestarán en ese momento.
Así que no os sorprendáis de ver alrededor vuestro, y por todas partes en el mundo, a unos hermanos y a unas hermanas dormidos sucumbir, si puedo decirlo así, a estos demonios, no para poner fin a sus vidas sino que empezarán, desgraciadamente, a realizar unas acciones por lo menos paradójicas, expresando una especie de locura. Esto no es nada y también forma parte, para esos seres, de un proceso de liberación. Pero si os pasa, podéis apelar a mi Presencia. Si mi respuesta os es adquirida, en cuanto el Fuego Ígneo haya nacido, os será también adquirida muy rápidamente incluso sin fuego. Mi Fuego actuará de todos modos, de todas las maneras posibles y saludables para vosotros.
Vuestra mejor muralla, si puedo decirlo así, es vuestro corazón, y en esos momentos, de poneros en el Corazón del Corazón, porque es durante esos momentos, si esto os ocurre, que paradójicamente habrá más facilidad para entrar en la Luz y en el Fuego Ígneo. Acordaos de este consejo: sea cual sea el tipo de manifestaciones y de presencias de las que seréis el objeto o sois el objeto, que esto atañe a los emisarios de la Confederación Intergaláctica de los Mundos Libres – donde no hay necesariamente un intercambio sino simplemente una forma de comunión, en general rápida –, que esto atañe a la visibilidad de los demonios de la tierra que serán efectivamente visibles en totalidad antes y después de la estasis, no hay que contemplar llevar ninguna protección. Acordaos que incluso la oscuridad, en esta fase, sirve más que nunca a la Luz. Si conseguís aceptarlo, entenderéis bien que no hay que luchar, ni oponerse a nada de lo que es invisible y que se vuelve visible. Sólo eventualmente llamar mi Presencia y mejor aún sería, previamente, de giraros hacia el Corazón del Corazón y hacia vuestra eternidad.
Las formas no os son conocidas. Existen innumerables formas que están muy lejos de las representaciones de las diferentes iconografías religiosas, en la tradición o religión que sea. Lo que fue nombrado los Djinns, lo que es nombrado entidades, lo que es nombrado demonios, lo que fue representado hasta ahora en las diferentes culturas y tradiciones, es sólo un pálido reflejo de lo que vuestros ojos verán y sentirán. Pero sentir y ver no quiere decir ser afectado, sentir y ver quiere decir simplemente también, tomar conciencia y atravesar. A través de esos elementos invisibles, y ya no solamente psicológicos o corporales, se os dará la posibilidad de afinar vuestra conciencia y afinar en cierto modo la instalación de vuestra eternidad.
Estos son los elementos que tenía que comunicaros. Aunque posiblemente puedan existir en vosotros unas preguntas sobre cómo proceder. Sin embargo dejaré al Comendador de los Ancianos, por su proximidad con vosotros, contestar a vuestras preguntas en relación con lo que acabo de mencionar y evocar.
Permitidme, antes de interrumpir mis palabras y mi presencia, de llevar a vuestra conciencia y a vuestro corazón, la espada de la Verdad. Soy el Arcángel Mikaël, Príncipe y Regente de las Milicias Celestes.
…Silencio…
En nombre del Único, en nombre de la Fuente, y en nombre del Amor, os saludo.
Me encanta el Argángel Miguel! me siento absolutamnete bendecida! Gracias, gracias, gracias!
ResponderEliminarQué hermoso mensaje!! Cuánta paz y confianza me da!! Eterno amor y gracia a todos los seres de Luz y al arcángel Miguel!!!
ResponderEliminarEste es un texto no fundamentado en hechos de naturaleza científica aunque intenta correlacionarse con algunos fenómenos reales.
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