viernes, 25 de septiembre de 2015

El Hombre Dios, el Hombre Creador por Guillermo


¡Queridos amigos, queridos amados, somos los Maestros ascendidos y os saludamos, Ayé Namasté!

A petición de nuestro querido Guillermo vamos a hablaros de la GRAN Ley de la Creación, pero antes de esto vamos a situar el contexto en el cual vivís.

Los seres de la Tierra, de hace mucho tiempo, de hace eones. En aquellos tiempo el hombre no estaba sometido como lo estáis hoy, estaban perfectamente libres en su morada, perfectamente en el hecho de su libre condición “de Hombre Dios” diríamos él SABÍA, él conocía su lazo con toda la Creación, no se preguntaba “Que si voy por ahí, tal vez tendría aquel resultado.” No! el Hombre de aquellos tiempos sabía que un deseo enunciado a partir del centro de su Ser, era escuchado y no tenía entonces ninguna duda en cuanto a la realización de su deseo.

Entonces queridos Seres humanos de hoy, esto para deciros que, tal vez ya lo observastéis, pero que vuestra “psique” funciona un poco de otro modo que los Seres de este tiempo ¿verdad? Os preguntáis sin cesar ¿Que voy a hacer de mi vida? ¿Voy a tener éxito? ¿Si elijo esto, será bueno para mí? (risas). Entonces nuestra respuesta es NO! (humor) si elegís en no creer que sois unos Seres ilimitados que poseen el poder Creador entre vuestras manos, entonces vuestra elección No es la “buena” según vuestros criterios.

¡La Buena y Verdadera elección es SER, queridos seres es la elección qué dice SÍ a vuestro corazón, es la elección que siempre habéis rechazado hasta ser empujados en vuestros puntos fuertes y de ser capaces más de “hacer” de otro modo, ved queridos seres humanos de la Tierra, si os interrogáis un poco menos sobre el por qué y el cómo entonces tal vez que podrían POR FIN ser quién Sois! (humor) y sí, queridos seres de la Tierra, quién no soñó en un pequeño paraíso en su Sí, quien no ha soñado con hacer tres veces la vuelta al mundo antes de tomar raíz? ¡pues nosotros seres en todo caso por la simple y buena razón que esto lo hemos cumplido y mucho más! ¿Cuando nuestro buen Amigo, aquel que llamáis Jesús decía “También haréis milagros, y me superareis” que creéis que decía exactamente? ¿Quedaos en vuestra casa y sobre todo no salgáis porque nunca se sabe, podrían caer sobre vosotros un Orangután imaginario por la calle? ¡Pues no queridos amigos! (humor) Tregua de broma, volvamos a cosas más serias.

Queridos seres de la Tierra, queridos Seres ilimitados, tenéis todo el Universo a vuestro servicio e incluso mucho más, estamos, nosotros, los Maestros ascendidos Buda, Jesús, St Germain...etc a vuestro servicio, estamos a la espera de una petición de vuestra parte en ACORDAROS quiénes Sois realmente, esperamos que os despertéis de vuestro letargo para salir finalmente de vuestra casa y expulsad este Orangután imaginario de vuestros pensamientos,

Sed serenos queridos hijos de la Luz porque NUNCA estáis solos. Aislados, cierto que lo estáis, pero es un aislamiento que vosotros mismos os infligisteis, “El hombre que en su morada se acuerda de quién es, no se inquieta del mañana e incluso de hoy, porque SABE sin duda alguna que su turno vendrá, que su Luz será tan poderosa, tan “detonante” que todos se apartarán delante de él para hacerle lugar de honor y vivir a su lado…“

Queridos Seres humanos, querido Ser humano que me leéis delante de tu pantalla de ordenador, yo el Maestro os pido recordaros de vuestro Origen, vuestra Luz y lo que hacéis, que vivís hoy, la Luz que anima vuestro cuerpo, las sinapsis que reaccionan a la lectura de estas palabras, recordaos, recordaos, recordaos, recordaos y no hay ninguna duda que tú también te harás un lugar en el mundo, que tú también vivirás feliz y satisfecho, que tú también me amarás como te amo y que juntos construiremos el mundo al cual todos aspiramos, un mundo de Armonía, de Paz, de Beatitud y de Jubilo.


De mi corazón a tú corazón, tú que me lees,  sabed que os deseamos la Paz.

Amen, Amen, Amen

Somos los Maestros ascendidos y hoy hemos hablado para ti.



http://guillaume-wakan.com/lhomme-dieu-lhomme-createur
L’Homme Dieu, l’Homme

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